El ex secretario de Estado norteamericano, Henry Kissinger, admitió
que para Estados Unidos el tema de derechos humanos y el establecimiento
de la democracia sirve para obtener sus propios intereses.
Washington sigue los asuntos de DD.HH. y el
establecimiento de la democracia hasta que concuerden con sus intereses
estratégicos en la región, consideró el político de origen germano en
el periódico alemán de Handelsblatt.
Henry Kissinger, quien ejerció como canciller de EE.UU. durante la
década 70, explicó que los nuevos líderes en los sistemas recién creados
en Oriente Medio deben ser conscientes de que la cantidad de apoyo que
les presta Washington, depende de la forma que suministren los intereses
norteamericanos.
Asimismo, subrayó la importancia de cambiar el rol que juega Estados
Unidos en diferentes países, especialmente en Oriente Medio, tras las
revoluciones populares en naciones árabes y del norte de África.
Según el político, las autoridades del país norteamericano en esa
importante región deben catalogar un moderado rol entre sus propios
intereses estratégicos y objetivos morales que los destacan.
Apuntando la situación que vive Siria, aseguró que Damasco sufre de
asuntos más complicados en comparación con Libia, Túnez, Egipto e Irak
porque el problema no es el tema de la democracia sino es la cuestión de
diferencias religiosas.
Al final, concluyó que de momento Washington se enfrenta una gran
contradicción en Siria, de un lado debe perseguir sus propios intereses
estratégicos en la región que sea posible a través de debilitar a Irán y
alejarlo de Damasco; y por otro lado quiere mostrar que persigue
elevados objetivos humanitarios como salvar y establecer la democracia.
HispanTV
No hay comentarios:
Publicar un comentario